miércoles, 20 de junio de 2012

¡Creando creación literaria! :)


Comenzamos el bloque 5, el último de esta asignatura, en el cual vamos a hablar sobre creación literaria.

Pero… ¿Qué es crear? o ¿qué es creación? o mejor aún, aquello que tenemos todos de una forma o de otra…CREATIVIDAD.


Pues empecemos a responder desde el principio, crear según la RAE es producir algo de la nada. Todo el mundo es capaz de hacer algo, todos en cualquier momento podemos crear, hacer una creación, cuando creamos sentimientos uno mismo y a los demás, creamos obras de arte, creamos palabras e historias. Y ¿qué es necesario para crear? Pues tener CREATIVIDAD.  Y algunos pensareis que os falta esta capacidad o que no sabéis desarrollarla, pero esto no es así, pues como decía  Gianni Rodari la creatividad es “ser capaz de romper continuamente los esquemas de la experiencia. Una mente creativa es aquella que trabaja siempre y está dispuesta a hacer preguntas, a descubrir problemas donde los demás encuentran respuestas satisfactorias”. Después de leer esto: ¿habéis cambiado de opinión?  Yo creo que sí. Pero si aún así no os he convencido del todo de que podéis ser creativos o no sabéis como desarrollar esa creatividad pues os dejo aquí un libro que escribió Rodari, que se llama “Gramática de la fantasía” donde nos muestra estrategias para crear historias y muchos juegos que estimulan esta creatividad.

Al hablar de la creación de historias comenzamos a adentrarnos en nuestro tema, pues no os olvidéis que es Creación Literaria.

Cuando hablamos de este tema, pensamos en personas mayores, pero… ¿un niño no puede crear literatura? Pues claro que sí, los niños son creativos por naturaleza, incluso mucho más que los adultos, ellos son capaces de imaginarse un castillo en su propio cuarto, unos personajes que crean una historia y hasta los diálogos aunque estén solos. Por ejemplo mi hermana cuando tenía 3 años, colocaba a las muñecas sentadas en las sillas y hacía ella de profesora. A los muñecos les enseñaba cosas, y les regañaba porque hablaban ¿Hablaban? Pues sí, ella era capaz de crear un diálogo en su imaginación para crear esa historia.


Nos debemos dar cuenta que los niños al crear literatura, crean su historia, donde muchas veces están plasmados sus sentimientos internos que muchas veces no explicarían mediante la palabra, pero que son capaces de expresarlos mediante un escrito. Por eso es importante que los niños hagan creación literaria, para que puedan expresar todas sus ideas y sentimientos, para desarrollar su propio pensamiento crítico y ser capaz de crear.

Rodari siempre creyó que los niños son capaces de hacer todo esto y para estimular la imaginación propone el método llamado “binomio fantástico”. Y os preguntareis, ¿qué significa este concepto? Pues significa enfrentar dos palabras extrañas entre sí. Para que estas palabras tengan relación es necesario el uso de la fantasía. Las dos palabras que hagan este binomio fantástico no tienen por qué tener relación la una de la otra, es más si no tienen relación es mucho mejor, pues desarrollaremos más la imaginación, esforzándonos en pensar una idea que generalmente no es normal. El ejemplo que nos pone Rodari es “perro-armario”.



Otras de las técnicas que nos aporta Rodari las podemos encontrar en esta página: http://www.neuronilla.com/desarrolla-tu-creatividad/tecnicas-de-creatividad/741-gramatica-de-la-fantasia-aportes-para-contar-historias , pero mientras la abrís os voy dejando unas cuantas ideas aquí:

-          La china en el estanque: del mi del mismo modo que cuando se tira una china a un estanque se producen ondas y distintos efectos a su alrededor, “la palabra lanzada a la mente por azar produce ondas de superficie y de profundidad”. Ejemplo: palabra “china”. Cuando la hacemos sonar y la ponemos en la mente se ponen de manifiesto:

  • Palabras que comienzan con “ch”: charco, chocolate, chupete…
  • Palabras que comienzan con “chi”: chiste, chimenea…
  • Palabras que riman en “-ina”: argentina, mina, rima, mandarina…
  • Etc.

Se producen asociaciones sencillas y complejas. Una palabra atrae a otra por inercia.
Una palabra al azar puede funcionar como palabra mágica.

Se podría descomponer la palabra “china” en:

  • C: Cien
  • H:hilos
  • I:imaginaban
  • N: negruzcos
  • A: algodones



-          Qué ocurriría si…: Se trata de hacernos preguntas para contar historias. Por ejemplo: ¿qué ocurriría si un hombre se despertase transformado en un escarabajo?

Para formular una pregunta, es necesario elegir al azar un sujeto y un predicado. Por ejemplo, con el sujeto “ríos” y el predicado “volar” podría salir: ¿qué ocurriría si todos los ríos se echasen a volar?



-          El prefijo arbitrario: un modo de volver productivas a las palabras es deformarlas, en sentido fantástico. Por ejemplo, con el prefijo “des-” podemos asociarlo a “perchero” quedando “desperchero”, que no sirve para colgar ropa sino para descolgarla sin despecho cuando se la necesita. Algunos prefijos:

  • Bis-
  • Maxi-
  • Anti-
  • Pre-
  • In-
  • Super-
  • Mini-
  • Etc.

Otra forma de realizar esta actividad sería hacer dos columnas, en una pondríamos los prefijos y en la otra los sustantivos que elegimos al azar y entonces también los podemos combinar según el azar.



-          Caperucita roja en helicóptero: partiendo del cuento clásico, por ejemplo, de Caperucita Roja, se identifican algunas palabras clave: “bosque”, “lobo”, “flores”, “abuela”, “niña” y la sexta palabra es la que rompe la serie: “helicóptero”. Se puede hacer lo mismo con diferentes cuentos. ¿Qué pasa si se añade una nueva palabra a la historia?



-          Los cuentos al revés: Invertir los cuentos tal y como se conocen. Por ejemplo: Blancanieves no se encuentra a 7 enanitos sino a 7 gigantes. ¿Cómo sigue la historia? Es aplicar la técnica de la inversión a un cuento.




Con todas estas actividades Rodari quiere que en la escuela se le dé más importancia a la creatividad del niño en lugar de a otras capacidades que puede tener. No quiere que tampoco nos confundamos con los términos imaginación y fantasía, pues es verdad que en muchos casos nos pueden llegar a confundir esos términos. Pues para que nos quede clara la diferencia aquí os la explico: la imaginación es una actividad reproductora mientras que la fantasía es una actividad creadora.  Por ello Rodari quiere que en la escuela, tal y como hemos dicho antes, se fomente esta fantasía, pues lo que conseguimos es niño con inquietudes, con una mente activa y descubridora.

Esta creación literaria la encontramos en los tres géneros literarios: prosa, verso y drama. Así vamos a ir viéndolos uno a uno.


Comenzamos con la prosa. La prosa es la forma más natural de escribir. Escribir en prosa es ocupar toda la línea del lugar donde escribamos. Hay varias actividades importantes que hay que llevar a cabo para hacer una buena creación literaria en prosa, algunas las podemos encontrar en esta página: http://www.zimbio.com/member/indigo/articles/466789/Consejos+para+escribir+en+prosa . Algunas de las características son la lectura en voz alta, la mejora de ortografía, practicar ejercicios de escritura libre, etc.

¿Queréis saber algunos ejemplos de esta creación literaria en prosa? Pues se pueden hacer revistas o periódicos escolares, un taller de cuentos, etc.

Y después de terminar la prosa… ¡llega el verso!

El verso se utiliza mucho en el género lírico, siempre siguiendo unas normas de ritmo y en muchas ocasiones de medida. Al seguir estas normas, en muchas ocasiones es más difícil trabajar esto con niños, pues para hacer esta creación se ha de estar bastante relajado y cómodo y dejar que nos vengan ideas a la cabeza, y en ocasiones en una clase no hay el ambiente adecuado, pero podemos buscar el momento adecuado que seguro que lo encontramos.

Y para que esta creación sea mejor aún vamos a diferenciar entre los términos de verso, poema y estrofa. El verso es cada línea de un poema, el poema es toda composición poética que está formada por versos y estrofas y por último la estrofa es un conjunto de versos relacionados por la medida y la rima.

Es importante mostrar a los niños diferentes figuras literarias, para que se puedan hacer una idea de cómo crear ellos su propia poesía, pues en muchas ocasiones aunque nos lo expliquen con palabras, no hay nada mejor que un ejemplo, y además así les daremos ideas para no crear siempre lo mismo. Es importante también leer en verso con los niños, para que se acostumbre a esa rima que suelen llevar y así cuando luego ellos realicen la actividad y la lean, vean que también lleva una pequeña rima.

Realizando este tipo de creatividad ayudamos a los niños a que expresen sus sentimientos, a que pongan a volar su imaginación y a los demás nos ayuda a ver cuáles son los pensamientos del autor, pues como ocurre con la prosa, los niños expresan sentimientos que no son capaces de expresar con palabras y esto nos ayuda a los profesores a conocerles más y a estar atentos por si necesitasen ayuda.

Y ahora, ¿qué nos queda? Pues sí, el género dramático, habéis acertado.


Este género está pensado y escrito para ser representado. En la representación aparecen distintos personajes representados por actores, los cuales deben ir vestidos de una manera determinados, con un escenario concreto, una música, luces, etc. Todos estos aspectos determinados nos llevan a dos elementos concretos, el espacio y el tiempo, elementos esenciales en este género.

El espacio es el lugar donde se va a representar la obra, por lo general suele ser un escenario donde va a ocurrir la obra.

El tiempo es el momento en el que se desarrolla la obra, ya sea el momento ficticio que dura la historia o el momento real cuando la representan los personajes.

Este género se puede diferenciar según el tipo de conflicto, y dan lugar a:

-          Tragedia: en el conflicto peligra la vida de algún personaje, y la obra gira en torno a eso. El final suele ser trágico y nunca mejor dicho, pues no suele acabar bien para ese personaje.

-          Drama: puede peligrar o no la vida de algún personaje. Puede tener un final bueno tanto como malo, dependiendo de la responsabilidad del personaje e interacción con los demás, por lo que hay mucha tensión e incertidumbre durante toda la obra.

-          Comedia: su final es feliz y sin grandes tensiones, aunque en ocasiones genera malos entendidos y enredos a lo largo de la obra.



Para terminar con este bloque, voy a dar algunas ideas para trabajar este género en el aula, al igual que lo he hecho antes con los otros géneros. Para empezar hay que dejar que los niños utilicen su imaginación, por lo que no debemos estar corrigiéndoles todo el rato, si se equivocan pues que se equivoquen, de los errores también se aprende y tampoco es que vayamos a representarlo delante de medio mundo.

Podemos realizar obras de teatro o guiñoles, ya creados o que creen ellos la propia historia, pudiendo leerla a la clase y entre todos podríamos elegir la mejor y representarla, aunque claro está que el resto las colgaremos en el corcho principal pues todos deben ver que su trabajo tiene recompensa, ¡recordar el refuerzo positivo!



Creemos un ambiente adecuado y motivador en el aula para un mejor aprendizaje y que poco a poco le vayan cogiendo el gusto a todo esto de crear literatura, así que como os digo en otros blogs… ¡ÁNIMO A ELLO! ;)


1 comentario:

  1. Muy bien. Deberías hablar un poco de que la creación en verso no implica obligatoriamente la rima e incluir los talleres de luvit con alguno de los ejemplos hechos en clase.

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