Comenzamos el bloque 5, el último de
esta asignatura, en el cual vamos a hablar sobre creación literaria.
Pero… ¿Qué es crear? o ¿qué es
creación? o mejor aún, aquello que tenemos todos de una forma o de
otra…CREATIVIDAD.
Pues empecemos a responder desde el
principio, crear según la RAE es producir algo de la nada. Todo el mundo es
capaz de hacer algo, todos en cualquier momento podemos crear, hacer una
creación, cuando creamos sentimientos uno mismo y a los demás, creamos obras de
arte, creamos palabras e historias. Y ¿qué es necesario para crear? Pues tener
CREATIVIDAD. Y algunos pensareis que os
falta esta capacidad o que no sabéis desarrollarla, pero esto no es así, pues
como decía Gianni Rodari la creatividad
es “ser capaz de romper continuamente los
esquemas de la experiencia. Una mente creativa es aquella que trabaja siempre y
está dispuesta a hacer preguntas, a descubrir problemas donde los demás
encuentran respuestas satisfactorias”. Después de leer esto: ¿habéis
cambiado de opinión? Yo creo que sí.
Pero si aún así no os he convencido del todo de que podéis ser creativos o no
sabéis como desarrollar esa creatividad pues os dejo aquí un libro que escribió
Rodari, que se llama “Gramática de la fantasía” donde nos muestra estrategias
para crear historias y muchos juegos que estimulan esta creatividad.
Al hablar de la creación de historias
comenzamos a adentrarnos en nuestro tema, pues no os olvidéis que es Creación
Literaria.
Cuando hablamos de este tema, pensamos
en personas mayores, pero… ¿un niño no puede crear literatura? Pues claro que
sí, los niños son creativos por naturaleza, incluso mucho más que los adultos,
ellos son capaces de imaginarse un castillo en su propio cuarto, unos
personajes que crean una historia y hasta los diálogos aunque estén solos. Por
ejemplo mi hermana cuando tenía 3 años, colocaba a las muñecas sentadas en las
sillas y hacía ella de profesora. A los muñecos les enseñaba cosas, y les
regañaba porque hablaban ¿Hablaban? Pues sí, ella era capaz de crear un diálogo
en su imaginación para crear esa historia.
Nos debemos dar cuenta que los niños
al crear literatura, crean su historia, donde muchas veces están plasmados sus
sentimientos internos que muchas veces no explicarían mediante la palabra, pero
que son capaces de expresarlos mediante un escrito. Por eso es importante que
los niños hagan creación literaria, para que puedan expresar todas sus ideas y
sentimientos, para desarrollar su propio pensamiento crítico y ser capaz de
crear.
Rodari siempre creyó que los niños son
capaces de hacer todo esto y para estimular la imaginación propone el método
llamado “binomio fantástico”. Y os preguntareis, ¿qué significa este concepto?
Pues significa enfrentar dos palabras extrañas entre sí. Para que estas
palabras tengan relación es necesario el uso de la fantasía. Las dos palabras
que hagan este binomio fantástico no tienen por qué tener relación la una de la
otra, es más si no tienen relación es mucho mejor, pues desarrollaremos más la
imaginación, esforzándonos en pensar una idea que generalmente no es normal. El
ejemplo que nos pone Rodari es “perro-armario”.
Otras de las técnicas que nos aporta
Rodari las podemos encontrar en esta página: http://www.neuronilla.com/desarrolla-tu-creatividad/tecnicas-de-creatividad/741-gramatica-de-la-fantasia-aportes-para-contar-historias
, pero mientras la abrís os voy dejando unas cuantas ideas aquí:
-
La china en el estanque: del mi del mismo
modo que cuando se tira una china a un estanque se producen ondas y distintos
efectos a su alrededor, “la palabra lanzada a la mente por azar produce
ondas de superficie y de profundidad”. Ejemplo: palabra “china”. Cuando la
hacemos sonar y la ponemos en la mente se ponen de manifiesto:
- Palabras que comienzan con “ch”: charco, chocolate, chupete…
- Palabras que comienzan con “chi”: chiste, chimenea…
- Palabras que riman en “-ina”: argentina, mina, rima, mandarina…
- Etc.
Se producen asociaciones sencillas y
complejas. Una palabra atrae a otra por inercia.
Una palabra al azar puede funcionar como palabra mágica.
Una palabra al azar puede funcionar como palabra mágica.
Se podría descomponer la palabra “china”
en:
- C: Cien
- H:hilos
- I:imaginaban
- N: negruzcos
- A: algodones
-
Qué ocurriría si…: Se trata de hacernos preguntas para contar historias. Por
ejemplo: ¿qué ocurriría si un hombre se despertase transformado en un
escarabajo?
Para formular una
pregunta, es necesario elegir al azar un sujeto y un predicado. Por ejemplo,
con el sujeto “ríos” y el predicado “volar” podría salir: ¿qué ocurriría si
todos los ríos se echasen a volar?
-
El prefijo
arbitrario: un modo de volver productivas a las palabras es
deformarlas, en sentido fantástico. Por ejemplo, con el prefijo “des-” podemos asociarlo a “perchero” quedando “desperchero”, que no sirve para
colgar ropa sino para descolgarla sin despecho cuando se la necesita. Algunos
prefijos:
- Bis-
- Maxi-
- Anti-
- Pre-
- In-
- Super-
- Mini-
- Etc.
Otra forma de realizar esta actividad sería hacer dos columnas, en una
pondríamos los prefijos y en la otra los sustantivos que elegimos al azar y
entonces también los podemos combinar según el azar.
-
Caperucita
roja en helicóptero:
partiendo del cuento clásico, por ejemplo, de Caperucita Roja, se identifican
algunas palabras clave: “bosque”, “lobo”, “flores”, “abuela”, “niña” y la sexta
palabra es la que rompe la serie: “helicóptero”. Se puede hacer lo mismo con diferentes
cuentos. ¿Qué pasa si se añade una nueva palabra a la historia?
-
Los
cuentos al revés: Invertir los cuentos tal y como
se conocen. Por ejemplo: Blancanieves no se encuentra a 7 enanitos sino a 7
gigantes. ¿Cómo sigue la historia? Es aplicar la técnica de la inversión a un
cuento.
Con todas estas actividades Rodari
quiere que en la escuela se le dé más importancia a la creatividad del niño en
lugar de a otras capacidades que puede tener. No quiere que tampoco nos
confundamos con los términos imaginación y fantasía, pues es verdad que en
muchos casos nos pueden llegar a confundir esos términos. Pues para que nos
quede clara la diferencia aquí os la explico: la imaginación es una actividad reproductora
mientras que la fantasía es una actividad creadora. Por ello Rodari quiere que en la escuela, tal
y como hemos dicho antes, se fomente esta fantasía, pues lo que conseguimos es
niño con inquietudes, con una mente activa y descubridora.
Esta creación literaria la encontramos
en los tres géneros literarios: prosa, verso y drama. Así vamos a ir viéndolos
uno a uno.
Comenzamos con la prosa. La prosa es
la forma más natural de escribir. Escribir en prosa es ocupar toda la línea del
lugar donde escribamos. Hay varias actividades importantes que hay que llevar a
cabo para hacer una buena creación literaria en prosa, algunas las podemos
encontrar en esta página: http://www.zimbio.com/member/indigo/articles/466789/Consejos+para+escribir+en+prosa
. Algunas de las características son la lectura en voz alta, la mejora de
ortografía, practicar ejercicios de escritura libre, etc.
¿Queréis
saber algunos ejemplos de esta creación literaria en prosa? Pues se pueden
hacer revistas o periódicos escolares, un taller de cuentos, etc.
Y
después de terminar la prosa… ¡llega el verso!
El
verso se utiliza mucho en el género lírico, siempre siguiendo unas normas de
ritmo y en muchas ocasiones de medida. Al seguir estas normas, en muchas
ocasiones es más difícil trabajar esto con niños, pues para hacer esta creación
se ha de estar bastante relajado y cómodo y dejar que nos vengan ideas a la
cabeza, y en ocasiones en una clase no hay el ambiente adecuado, pero podemos
buscar el momento adecuado que seguro que lo encontramos.
Y
para que esta creación sea mejor aún vamos a diferenciar entre los términos de
verso, poema y estrofa. El verso es cada línea de un poema, el poema es toda
composición poética que está formada por versos y estrofas y por último la
estrofa es un conjunto de versos relacionados por la medida y la rima.
Es
importante mostrar a los niños diferentes figuras literarias, para que se
puedan hacer una idea de cómo crear ellos su propia poesía, pues en muchas
ocasiones aunque nos lo expliquen con palabras, no hay nada mejor que un
ejemplo, y además así les daremos ideas para no crear siempre lo mismo. Es
importante también leer en verso con los niños, para que se acostumbre a esa
rima que suelen llevar y así cuando luego ellos realicen la actividad y la
lean, vean que también lleva una pequeña rima.
Realizando
este tipo de creatividad ayudamos a los niños a que expresen sus sentimientos,
a que pongan a volar su imaginación y a los demás nos ayuda a ver cuáles son
los pensamientos del autor, pues como ocurre con la prosa, los niños expresan
sentimientos que no son capaces de expresar con palabras y esto nos ayuda a los
profesores a conocerles más y a estar atentos por si necesitasen ayuda.
Y
ahora, ¿qué nos queda? Pues sí, el género dramático, habéis acertado.
Este
género está pensado y escrito para ser representado. En la representación
aparecen distintos personajes representados por actores, los cuales deben ir
vestidos de una manera determinados, con un escenario concreto, una música,
luces, etc. Todos estos aspectos determinados nos llevan a dos elementos
concretos, el espacio y el tiempo, elementos esenciales en este género.
El
espacio es el lugar donde se va a representar la obra, por lo general suele ser
un escenario donde va a ocurrir la obra.
El
tiempo es el momento en el que se desarrolla la obra, ya sea el momento
ficticio que dura la historia o el momento real cuando la representan los
personajes.
Este
género se puede diferenciar según el tipo de conflicto, y dan lugar a:
-
Tragedia: en el conflicto peligra la vida de
algún personaje, y la obra gira en torno a eso. El final suele ser trágico y
nunca mejor dicho, pues no suele acabar bien para ese personaje.
-
Drama: puede peligrar o no la vida de algún
personaje. Puede tener un final bueno tanto como malo, dependiendo de la responsabilidad
del personaje e interacción con los demás, por lo que hay mucha tensión e incertidumbre
durante toda la obra.
-
Comedia: su final es feliz y sin grandes
tensiones, aunque en ocasiones genera malos entendidos y enredos a lo largo de
la obra.
Para
terminar con este bloque, voy a dar algunas ideas para trabajar este género en
el aula, al igual que lo he hecho antes con los otros géneros. Para empezar hay
que dejar que los niños utilicen su imaginación, por lo que no debemos estar corrigiéndoles
todo el rato, si se equivocan pues que se equivoquen, de los errores también se
aprende y tampoco es que vayamos a representarlo delante de medio mundo.
Podemos
realizar obras de teatro o guiñoles, ya creados o que creen ellos la propia
historia, pudiendo leerla a la clase y entre todos podríamos elegir la mejor y
representarla, aunque claro está que el resto las colgaremos en el corcho
principal pues todos deben ver que su trabajo tiene recompensa, ¡recordar el
refuerzo positivo!
Creemos un
ambiente adecuado y motivador en el aula para un mejor aprendizaje y que poco a
poco le vayan cogiendo el gusto a todo esto de crear literatura, así que como
os digo en otros blogs… ¡ÁNIMO A ELLO! ;)
Muy bien. Deberías hablar un poco de que la creación en verso no implica obligatoriamente la rima e incluir los talleres de luvit con alguno de los ejemplos hechos en clase.
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